“La reforma educativa en México tiene como consecuencias el despido masivo de trabajadores de la educación y la reducción de los contenidos educativos”

Entrevistamos a Juan Melchior Román, de la Dirección Política de la CNTE, quien nos comparte algunas reflexiones sobre la reforma educativa que se impulsa en México, y la propuesta alternativa para transformar la educación del país, que plantea su sindicato

Por Fabíola Munhoz y Samuel Grillo de la CLADE

El 7 de diciembre, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de Educación (CNTE) de México lanzó la “Iniciativa Ciudadana en Materia Educativa”, la cual propone la derogación de los cambios constitucionales que fueron determinados en el marco de la reforma educativa que se impulsa en el país, y de sus leyes reglamentarias, así como un análisis puntual de las leyes y artículos que lesionan derechos laborales y humanos de las y los docentes, defendiendo además la participación de la sociedad mexicana en tal proceso [sepa más].

Ante este contexto, entrevistamos a Juan Melchior Román, de la Dirección Política de la CNTE, sección 18 de Michoacán, quien nos comparte algunas reflexiones sobre la reforma educativa y la propuesta alternativa para transformar la educación del país que plantea su sindicato. Lea a continuación.

¿Por qué la CNTE se opone a la reforma educativa que se lleva a cabo en México y cuáles son sus implicaciones para el magisterio?

La reforma educativa forma parte de un paquete de reformas estructurales en nuestro país, y hace cuatro años que estamos luchando contra la misma. Principalmente nos oponemos a esta reforma educativa porque modifica el artículo 3º y el 73 de la Constitución Federal, y plantea cuestiones laborales y de orden administrativo que no son una verdadera reforma en el terreno pedagógico. Las implicaciones de esta reforma, que es laboral y administrativa, y no educativa, es la separación del servicio de al menos el 30% de la planta docente en este país, lo que representa alrededor de un millón y quinientos mil trabajadores.

Nosotros, como trabajadores, hemos resistido a esta reforma, primeramente, porque, por medio del pretexto de la evaluación, la misma plantea clasificar y certificar la labor docente, y a la vez quiere limitar la calificación docente al buen desempeño en exámenes de opciones múltiples, los cuales no son suficientes para evaluar la calidad social educativa, ni para mejorar el sistema educativo. Una de las implicaciones de esta reforma es el despido masivo de los trabajadores y la otra, en lo que toca al campo pedagógico, es la reducción aún más grande de los contenidos educativos que tienen que ver con la formación integral de las y los estudiantes, pues la formación docente y las clases se limitarán a los conocimientos técnicos exigidos en estas pruebas.



¿Qué propone la Iniciativa Ciudadana en Materia Educativa que la CNTE ha lanzado en la semana pasada y cuál es su importancia?

La Iniciativa Ciudadana, que es una de las luchas de resistencia del magisterio en este momento, plantea darle el carácter pedagógico a la ley educativa y rechazar todos los aspectos laborales que se han creado en esta ley con la actual reforma educativa.  Pero, de manera muy importante, la reforma en que estamos trabajando desde el mes de agosto, y sobre la cual hoy tenemos un documento completo que entregaremos al Senado de la República, propone una evaluación de carácter totalmente integral, que recupere su esencia original, que es el diagnóstico de problemas, tanto de orden económico, material o pedagógico, pero que también plantea una solución de la problemática de manera colectiva.

La evaluación que propone nuestra Iniciativa Ciudadana pretende recuperar el proceso de enseñanza-aprendizaje de manera completa. Es decir, la evaluación no sería aplicada por separado del proceso de enseñanza-aprendizaje. En ese sentido, planteamos que se convierta el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) en el Instituto Nacional de Evaluación Integral de la Educación, donde, desde las escuelas y los centros de trabajo que refieren a la administración y la procuración de la educación, todos podamos participar de una evaluación colectiva.

¿Cómo debe ser en tu mirada una evaluación educativa garante de derechos?

La evaluación es la parte más importante de la reforma educativa, tanto la del gobierno cuanto la que proponemos desde la CNTE. Sin embargo, el modelo de evaluación que defendemos y el que determina la reforma educativa oficial se contraponen totalmente. Ellos proponen una evaluación para el premio y el castigo, nosotros lo que decimos es que la evaluación debe ser garante del proceso de enseñanza-aprendizaje primero, pero también de que los niños y niñas, desde jóvenes, tengan la posibilidad de completar sus estudios en cualquier uno de los niveles. Planteamos que la educación no es un servicio, sino que es un derecho establecido en el artículo tercero constitucional.

En todo caso, el documento de la Iniciativa Ciudadana, que estamos por entregar al Senado Federal el 2017, recupera, en su planteamiento, toda la dignidad humana y quita del escenario de la educación los aspectos de calidad en torno a cuestiones de productos y de manufactura que nos han aplicado, pero no pueden ni deben aplicarse a seres humanos.